¡Hola a tod@s!
Resulta complicado ponerse delante de la cámara cuando generalmente es una la que está detrás de ella. Podría contaros muchas cosas sobre cómo llegué hasta aquí. Podríamos capuzarnos en un montón de tópicos que tampoco arrojarían nada de luz al respecto porque al final son eso, tópicos. No creo que la edad a la que cogiera mi primera cámara sea relevante o me haga mejor profesional. La vida es un ir y venir de situaciones y circunstancias; de personas, de viajes, de amaneceres vistos, de conversaciones, de películas, de libros, de experiencias, de perfecciones, de la falta de ello, de sombras y de LUZ.
Soy Almudena, una persona que ama los placeres pequeños de la vida. Me gusta hundir la mano en la arena, oler a tierra mojada, andar descalza, cantar en la ducha, reventar burbujas de plástico, partir con la cuchara el caramelo de la crema catalana y pintarme los labios de rojo. Creo por encima de todo en la libertad de las personas y tengo varios vicios confesables; cambiar de montura de gafas es uno de ellos. Quiero a mis padres profundamente y amo a mis hijos y a su padre hasta el infinito y más allá. Y Además de todo eso, sí, soy fotógrafa.